Ha llovido muy seguido durante la última semana, hasta que anoche llegó la nieve. Nevó algo y luego regresó la lluvia. No fue mucha nieve pero lo suficiente para sentir el frío. Hay una leve brisa pero también es suficiente para acentuar la sensibilidad de nuestra piel. En realidad no es mucha la diferencia de temperatura, que ha oscilado entre 2 y 12 grados centígrados. Pero nuestra mente es influida por el paisaje, por estar conscientes de que «ha llegado el invierno».
En las horas libres de estos días he leído mucho. Sigo leyendo el libro de Detlev Ganten. Pero también he leido mucho sobre otros temas en distintas páginas web, además de las noticias de actualidad y los análisis de sucesos políticos y económicos. He traspasado algunos de los artículos del blog que había desaparecido. He releído mis propios artículos sobre la familia y quisiera ampliarlos, aclarar más conceptos. Creo que logré centrar la idea principal en esos artículos pero hay muchas cosas que se deberían analizar con mayor profundidad. Lo que queda claro, según mi punto de vista, es que ninguna religión debe creerse la poseedora de toda la verdad y menos con la autoridad suficiente como para decidir lo que deben hacer los ciudadanos de un país en lo que respecta a la formación de una familia, al divorcio, al aborto, etc. Las religiones deben preocuparse de la parte moral y de lo que concierne a sus propios feligreses. Por ningún motivo deben tener acceso a la gobernabilidad de un país. La religión no debe mezclarse con la legislación de un estado o república así como tampoco en la administración de la justicia.