Me había hecho un plan muy completo para el día de hoy, puesto que terminaría de trabajar más temprano que de costumbre: iría a comprar, ordenar un poco en casa y luego escribir en mi blog. Pero fue imposible. Ya van a ser las 11 de la noche y me siento frente al teclado con los ojos casi nublados, la espalda con varios músculos tensos y afectados. No entiendo cómo pude quemar tántas enegías en tan poco tiempo. Primero, durante la jornada de trabajo, fue un exceso de esfuerzo intelectual, atendiendo a varios alumnos y nuevos clientes. Más tarde, cuando creía que iba a «descansar» vino el trabajo físico hasta hace sólo un par de minutos y aún tengo muchas cosas pendientes por hacer. Cómo voy a poder escribir? De dónde voy a sacar fuerzas y tiempo?
Cuando me dí cuenta de que no iba a poder escribir en mi otro blog sobre varios temas pendientes me dispuse a escribir en éste. Pero en este mismo instante me siento incapaz de hacerlo. Espero poder escribir durante los próximos días.