Son más de las 8 de la noche, en Suecia. Siento una especie de tensión, intranquilidad. Me digo una y otra vez que no hay que preocuparse, que nuevamente se celebrará una elección en Venezuela con toda normalidad, que son muchas las elecciones desde que Chávez comenzara a gobernar, en el año 1998. Y todo parecía ir bien hasta hace un par de horas. Pero de pronto ya no se puede abrir la página de VTV (que muchas veces tiene problemas, a veces en los teléfonos móviles, otras veces en los ordenadores portátiles o los estacionarios y a veces no se puede abrir en ningún sitio). Las interferencias se han producido varias veces durante el día. Cuando eso sucede empiezo a imaginarme lo peor. Así como se producen apagones continuos e inesperados en Venezuela, que supongo pueden ser ensayos para provocar el caos y facilitar algún tipo de Golpe de Estado o de intervención extranjera, se puede intentar bloquear a los medios de comunicación del gobierno.
Las elecciones de hoy son para elegir alcaldes y concejales. Pero todas las eleciones se pueden considerar como una evaluación de las actividades del gobierno nacional. La oposición va mucho más allá porque intenta transformar las elecciones en una especie de revocatorio del gobierno. Tal vez sea una buena ocasión para la gente de ultra derecha. Pero es posible que sus planes no prosperen y nada ocurra. Supongo que el gobernador de Miranda (Henrique Capriles) va a aparecer en los medios privados para hacer denuncia de fraude (sin tener pruebas), en la misma forma que lo ha hecho en otras oportunidades. Si gana la derecha, por supuesto que Capriles no va a denunciar fraude, pero se le puede ocurrir exigir la dimisión del presidente Nicolás Maduro o la convocación a nuevas elecciones presidenciales. Durante las próximas podremos saber cómo va a continuar el proceso bolivariano en Venezuela.
Después de una pausa: 10 de la noche:
Por fin se pudo entrar a la página de VTV y eso me ha dado mucha tranquilidad. Sin embargo, la programación del canal público me ha decepcionado una vez más. Los presentadores y periodistas se suceden continuamente ante las cámaras y se entrevista a los votantes. La mayoría de las preguntas son absurdas, no son importantes. Se repiten una y otra vez y como son absurdas, las respuestas también lo son. Flaco favor la hacen esos presentadores y periodistas a la lucha revolucionaria. Falta preparación y un enfoque más dinámico, con un temario de preguntas más inteligentes. No todo está mal, por supuesto. También ha habido declaraciones y entrevistas a líderes políticos y candidatos. Pero VTV está my lejos de ser un medio eficiente y verdadero instrumento de información.